La causa judicial que involucraba al fiscal de Instrucción N°5, Hugo Costilla, por su participación en el polémico acuerdo de reparación integral en el caso Rolón, quedó virtualmente archivada luego de que el fiscal Miguel Mauvecín decidiera no presentar acusación. La situación recuerda al conocido caso "Wika", que también culminó sin acciones judiciales contra los imputados.
El Tribunal del Jury de Enjuiciamiento a Jueces y Funcionarios del Poder Judicial de Catamarca, presidido por la ministra Fabiana Gómez, había emplazado a Mauvecín para que definiera si acusaba o no a Costilla por presunto "desconocimiento del derecho" en el manejo del expediente que permitió la liberación de los cuatro sujetos responsables del violento asalto a la familia Rolón, ocurrido en el barrio Parque América. El funcionario, en la presentación realizada este mismo martes, indicó que a su juicio "no hay elementos válidos para iniciar un juicio de destitución",
Ante esto, toca que el Tribunal de Jury ahora defina si da lugar a esto, lo que se conocerá recién este jueves. Allí tras analizar la respuesta de Mauvecín, podría mandar a archivo esta causa tal y como pasó con el otro pedido de jury contra el fiscal Costilla.
La denuncia inicial, presentada a fines del año pasado, había generado un amplio debate en la provincia debido a la resolución judicial que habilitó un acuerdo de reparación integral, considerado por muchos como controvertido y perjudicial para la percepción de justicia en el caso. Sin embargo, la decisión final de Mauvecín de no avanzar con la acusación implica que el proceso seguirá su curso hacia el archivo, sin imputaciones adicionales.
Durante el desarrollo del proceso, Mauvecín intentó apartarse de la causa aduciendo una relación laboral y de amistad con Costilla, planteo que fue desestimado por el tribunal por considerar que no existían causales válidas para su inhibición. El emplazamiento para decidir sobre la acusación había sido extendido hasta seis días hábiles desde el 21 de octubre, período que Mauvecín utilizó mientras se encontraba cumpliendo funciones en un juicio por jurado en Tinogasta.
Con la posibilidad de una nueva causa archivada, la atención se centra ahora en la gestión judicial y en cómo las decisiones sobre acuerdos de reparación integral impactan en la confianza ciudadana hacia el sistema judicial. Recordemos que especialistas sostienen que estos casos ponen de relieve la necesidad de revisar procedimientos internos y criterios de decisión de fiscales y jueces en situaciones de alta repercusión social.
De cerrarse este caso judicial de esta manera, por el que pasaron varios fiscales inhibiéndose por "amistad manifiesta" con el acusado, se abre la reflexión sobre si la interacción entre la administración de justicia y la percepción pública, así como sobre la transparencia y el rigor profesional en la resolución de casos que involucran delitos graves y la reparación integral a las víctimas siempre tendrán un final escrito de antemano.
